Reyes infantiles, Mirada Torres Rosales e Isaac Rodríguez.
Reyes infantiles, Mirada Torres Rosales e Isaac Rodríguez.
Foto
Cristian Mercado

Share:

Barranquilla gozó con danzas y la oralidad en la Gran Parada de Tradición

Participaron más de 90 grupos folclóricos del Carnaval de Barranquilla.

Un desfile lleno de folclor y riqueza cultural se vivió en la Vía 40 en la Gran Parada de Tradición, cuando miles de personas se congregaron la tarde de este domingo en el Cumbiódromo para apreciar las danzas, disfraces y demás expresiones que le significaron al Carnaval de Barranquilla ser declarado Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad.

Previo al desfile, el grupo de letanías ‘Los repelentes de Soledad’ recitaron versos jocosos relacionados con la actualidad local y nacional. Agregándose de un toque de picardía “llegamos los repelentes para alegrar a los presentes”. 

Minutos más tarde, la Danza de Cabezones y Gigantonas se asomó por la Vía 40, celebrando con gran orgullo sus 90 años de participación en el Carnaval

La Reina Isabella Chams.

Cumbiamba La Arenosa llegó al son del estrepitoso sonido de la tambora y la flauta de millo para poner a bailar a los asistentes.

Este ritmo insignia de la fiesta siguió por cuenta de la cumbiamba  El Cañonazo, que llevaba el vestuario tradicional (con colores rojo y blanco) además de portar velas y tabacos en la boca, en el caso de las mujeres.

El Congo Grande y Congo Grande de Galapa iban sonando sus machetes contra el suelo a su paso por la Vía 40, luciendo llamativos turbantes.

La organización folclórica cultural Bambazu hizo presencia con sus agitados movimientos de mapalé, danza de liberación de herencia africana que nutre la carnestolenda año tras año.

Mezclas afrocolombianas Fundarte llegó desde Malambo para enseñar la riqueza cultural que dejó el mestizaje.

Danza Cipote Garabato.

“Buenas tardes Barranquilla, buenas tardes cómo estás”, iba coreando el Cipote Garabato, que cumple 30 años de presencia en la celebración, demostrando una vez más que la vida siempre le ganará a la muerte.

La Danza Añoranzas dejó claro que la avanzada edad no es impedimento para gozarse la festividad, porque quien nace siendo carnavalero lo será toda la vida.

Desde Santa Lucía el Son de Negro dijo presente al desfile de la Gran Parada para hacer muecas y retorcer su cuerpo, mientras las mujeres faldeaban al compás del tambor. 

El Imperio de las Aves.

El Imperio de las Aves participó en el recorrido en el marco de la celebración de sus 90 años, hecho que los hizo merecedores de un homenaje por parte del Carnaval.

La Danza Paloteo Mixto evocó la confrontación vivida en época de batallas, simbolizando la guerra entre naciones con el choque de palos.

Teniendo su origen en la depresión momposina, las Farotas de Talaigua bailaron en círculos el Cumbiódromo como festejo al vengarse de los españoles en la época colonial por violar a sus mujeres.

El Torito Ribeño, la danza más antigua del Carnaval de Barranquilla, mostró su jerarquía de 142 años de existencia.

Diablos Arlequines de Sabanalarga danzarin al son de castañuelas y asombraron a visitantes cuando echaron, literalmente, fuego por la boca.

Las Casas Distritales de Cultura exhibieron el talento de sus integrantes, algunos de ellos personas con discapacidad, que enviando un mensaje de inclusión ya que la fiesta es de todos.

Un bloque conformado por disfraces individuales deleitó al público con su ingenio y creatividad, La Chilindrina, Popeye, el Papa Francisco, fueron algunos de los más aplaudidos.

La Reina Popular 2020 Melanee Cantillo bailó mientras saludaba a la gente cautivándolos con su carisma.

Danza de los Coyongos y Danza de los Goleros, fueron algunas Danzas de Relación que rescataron la oralidad, elemento esencial del Patrimonio.

La Danza Especial  Micos y Micas Costeños se robaron risas de los presentes con sus ocurrencias.

La Danza del Caimán vino desde Ciénaga, Magdalena, bailando y entonando los versos: “ay mijita linda donde está tu hermana, el caimán se la comió”.

La Reina del Carnaval de los Niños Miranda Torres rindió tributo especial con su vestuario a Blanca Céspedes, directora de los Indios Piel Roja, mientras que el Reyecito Isaac Rodríguez homenajeó a los cumbiamberos.

Unos cuantos metros atrás se asomaba la soberana de la fiesta. Isabella Chams lució un traje negro traslúcido con pedrería y un tocado con la imagen de un gorila.

La Reina invitó a los carnavaleros a levantarse y bailar, mientras soñaba de fondo la canción oficial del Carnaval 2020, ‘Pa’ que lo viva la gente’.

El desfile continuó con Indios Farotos, Monocucos, Marimondas y demás personajes que engalanan la fiesta anualmente mientras conservan la tradición.

Más sobre este tema: