Una grave situación ambiental se viene registrado en la IE Marco Fidel Suárez, ubicada en el barrio La Magdalena, al sur de Barranquilla.

Según los padres de familia, a los estudiantes de tercero de primaria “los tienen dando clases en un salón donde hay heces de palomas en gran cantidad, ya el olor es muy fuerte y la directora no presta atención a las quejas por parte de los padres”.

Ante los reiterados llamados de los padres, los niños fueron cambiados de salón y trasladados hasta un laboratorio, pero el problema persiste porque no se procede con la limpieza y fumigación que el caso requiere con máxima urgencia.

Los padres cuestionan el hecho de que las directivas del colegio, al momento de matricular a los estudiantes, exigen el pago de una cuota de 30 mil pesos, cuyo producido podría fácilmente utilizarse en asuntos de emergencia como este.

También critican que las directivas del plantel hagan caso omiso a las reiteradas quejas, aumentando el nivel de contaminación y, en consecuencia, los riesgos para la salud de los niños.

Por esto, exigieron la pronta intervención de la Secretaría de Educación para solucionar el problema lo más pronto posible.